En el episodio titulado "Una argucia, una yonqui y un vecino al borde de la muerte" ,dolido tras su ruptura con Berta, el conserje del complejo residencial decide acoger temporalmente a Chusa, una antigua novia toxicómana, para dar celos a la primera dama de la comunidad. Mientras tanto, Antonio redobla sus esfuerzos para descubrir al amante de su mujer entre los varones de "Mirador de Montepinar". Tras encontrar unas llaves bajo su cama, el primer mandatario centra sus sospechas en Javi.
Por otra parte, Maite decide llevar a juicio a Amador para que el juez le obligue a a pagar la pensión alimenticia de los niños. Sin embargo, "el Cuqui" intenta eludir su responsabilidad económica pidiendo una prueba de paternidad de sus tres hijos, iniciativa que ofende sobremanera a la divorciada. Cansadas de la excesiva verborrea y enérgica personalidad de Maite, Judith y Raquel ponen en práctica diplomáticas estrategias para sortear la compañía de su vecina.
La reparación de una gotera en la habitación de Estela provoca un continuo ir y venir de albañiles y fontaneros en el apartamento de Javi y Lola. La presencia de los viriles profesionales llevará a la diva del destape a dar un impulso a su exigua vida sexual.
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